martes, 27 de septiembre de 2011

horas (re)vueltas



Amaneció y las horas se fueron apilando frente a mi ventana, unas aparecían rojas y llenas de elefantes, otras como medusas bailaban acariciando cada segundo. Algunas completamente perdidas de polvo y telarañas miraban con sorpresa a las que aún mostraban la etiqueta entre sus dedos. A lo lejos, se acercaba una hora mayúscula muy preocupada mientras se le desparramaban  cien segundos brillantes entre su levita. Cada vez llegaban de sitios más recónditos con  barba de tres días y con prisa de gran fuego,  descaradas y llenas de orugas blanquecinas. Y así se fue aproximando el nuevo amanecer que volvería a traer una pandilla de horas dispares, unas tan intensas como huecas las siguientes. A veces vuelvo a mirar por la ventana, y ahí siguen tan azules, tan amarillas, tan llenas de frambuesas, tan fugaces apuntalando segundos, dibujando minutos repletos de hojas, agolpándose siempre fuera, frente a mi ventana.

viernes, 23 de septiembre de 2011

En la siguiente curva ... grito


Agua, bostezos, cal y olivos

En cada surco mi garganta cruje,
en los velones - el más negro aceite -
siglos y rezos

Calla el zaguán, el jazmín tiembla,
nunca el silencio goteó risas.

Olivos, hambre, agua y sal.

domingo, 11 de septiembre de 2011

tel-arañas (dos palitos)


Ratón tiene en sus espaldas atados tres machos tres, locos que quizás un día pensaron ser (como todos) más inmortales, más listos pero eran tan de carne y hueso como vacío su salvaconducto para respirar.

Todos contratan al asesino para jugar de nuevo a susto o muerte, así dicen, el prestigio se multiplica. Las aceras volverán a teñirse de miedo, ruido y sangre. Hay colas para correr junto a él, las chicas se operan los labios (todos), lo mejor, sin duda es la noticia de adopte un burro mucho más razonable que lo de, adopte a un obispo o a un diputado (aún no tengo claro si hablan de los parientes de Platero o de los que guardan turno desde la madrugada para correr y ser el cuarto macho muerto).

Mañana se homenajea a los tristemente desaparecidos en las torres, que quedarían pequeñas si incluyéramos en su superficie todos los muertos por guerras mercado, hambre mercado…. Y sigue la ruleta rulando, la banca siempre gana señores ¡hagan juego! ¡hagan su juego!

Mañana debiera estar soplando las velas de una tarta que en abril me estamparon en el alma pero esto tengo claro no es noticia.


viernes, 9 de septiembre de 2011

Mentimos al suelo que nos abraza lento


Hoy escribí un poema lleno de pinchos y todas las diademas destrozadas, había hasta pájaros encendiéndose de frío y canciones en el trozo de hielo que se me deshace en los sueños. Me llené de orgullo y lancé todas las plumas como si fuera confeti por la ventana. Era un enorme pavo real en pleno cortejo, satisfecho de su infinito.

Hoy escribí un jeroglífico  que hice enterrar en el solar de al lado pues al primer chasquido se convirtió en caracol vacío, salvé el título que siempre me recordará que algún día abrazaré todas las nadas que fui enterrando en el solar de al lado, donde no hay ni lágrimas.

Hoy escribí nada