apuntalando las raíces locas
que destaparon cien gacelas agua
entre alfileres los latidos queman
abriendo cada poro, cada ruido
mientras las X nos despejan
cuatro relámpagos sin traje
calles desnudas resbalando lento
aceras rotas entre sangre y humo
y en cada esquina
aún tu voz
viene
y
nunca se va
No hay comentarios:
Publicar un comentario